Habrase visto!!!

Jordi Pujol se lava las manos. Dice que sus hijos tienen su vida y que él solo respondo de sí mismo. El señor Pujol intuyo que está poniendo su barba a remojar.

El presidente Mas, amén de las deudas que su Gobierno ha creado con unos y con otros y además de las deudas que se le están acumulando, tendrá que abonar una indemnización de 20 millones de euros a los propietarios y concesionarios de la plaza de toros de Barcelona, consecuencia de su prohibición de las corridas en su comunidad autónoma. El pago correrá, claro está, a cargo del contribuyente catalán, sean o no amantes de corridas y rejoneos. Mas juega con un presupuesto, aún no aprobado, mientras se ha detectado que cientos de niños de su comunidad acuden tempranamente al colegio sin haber cenado la noche anterior ni desayunado esa mañana.

Más de treinta mil universitarios pueden quedar expulsados de los campus a lo largo y ancho del país por declarárseles moros al no haber abonado las tasas académicas de este curso. A la crisis general que sufre el país, los continuos despidos, la destrucción descontrolada de empleo, la nula contratación y creación de trabajo (aunque se festejen los cien mil empleos del mes pasado), se añaden los recortes en las becas, la subida de un punto de la media para solicitar la primera beca, la subida vertiginosa que han sufrido las tasas académicas, entre otras cosas, han llevado al país a esta situación.  Algunas situaciones son un esperpento: el joven catalán que quedándole una asignatura para terminar su carrera, no podrá continuar matriculado porque le faltan 300 euros para poder formalizar su matrícula. Seguro que don Ramón María del Valle-Inclán, creador del género literario, se quedaría estupefacto para no decir acojonado, viendo en qué se ha convertido el país. Esto nos va superando a todos por momentos cuando se afirma que, por las fechas que corren, algunas universidades no han decidido todavía a los afortunados de las pocas becas que van a otorgar.

Al presidente sirio Bashar Al Assad que está llevando en su país una masacre y un exterminio de ciudadanos, se le atribuye la posesión y utilización de armas químicas. Al Assad, causante de las malas caras observadas estos días de atrás entre los presidentes Obama y Putin en las reuniones del G 8, se dice que dispone de cientos de toneladas de agentes químicos diferentes como el gas sarín o el más potente todavía gas VX. Pero se comenta también que es un misterio el dato exacto acerca del arsenal de que dispone. La cosa es tan fácil como que las empresas occidentales declaren qué le han vendido al dictador, no vaya a pasar como en Irak donde se confirmó, pero posteriormente, de que no había armas de destrucción masiva como afirmaban los señores Bush y Aznar.

De todas formas, no se olviden de Gaza ni de Siria.