Insensateces políticas
La señora Díaz Ayuso, por desgracia presidente de la Comunidad de Madrid, hace de su capa un sayo. Decide cerrar Madrid los puentes, pero qué puentes señora. Los lunes 1 y 9 de noviembre, dos festivo que tanto el Gobierno como la Comunidad manejan a su antojo para hacer cuadren las fechas festivas del país y de la comunidad, pasando un día festivo que cae en domingo al lunes siguiente.
Ayuso tiene a casi todo el mundo en su contra. Todos los partidos políticos y sindicatos de tendencia izquierdista de Madrid, han firmado un documento donde explican los tropiezos y las malas acciones en que ha caído Díaz Ayuso. Califican el comportamiento de su gobierno de “errático, temerario, insensible e incapaz de adoptar las decisiones adecuadas para afrontar la situación sanitaria provocada por la Covid-19,… con el pretexto de la recuperación económica”.
Díaz Ayuso ha optado por una política frentista y de llevar la contraria, incluso contradiciéndose ella misma. Ha montado un hospital de campaña en Ifema en vez de apoyar y reforzar las secciones cerradas de un montón de hospitales consagrados hasta terminar de hacerles inservibles para cumplir su labor en estos tiempos que corren. Ha contratado y despedido a personal necesario e imprescindible para cubrir las necesidades sanitarias que se precisan en estos momentos, teniendo en cuenta que hay cinco mil profesionales de baja por contagio. Y sin criterio ni razón, ha cerrado el hospital de campaña cuando la pandemia seguía haciendo estragos en la ciudadanía. Ha mal gestionado las residencias de mayores donde han fallecido alrededor de ocho mil personas. Ha presionado y solicitado el pase de la Comunidad a la Fase 1 de desescalada, sin cumplir las condiciones necesarias que respetaron las demás comunidades. Y tantas cosas más a sabiendas que la Comunidad registra diariamente alrededor de 618 casos activos por cada cien mil habitantes, cuando otras ciudades no superan los 350 casos.
Con todo esto y muchas más cosas, se puede decir que Díaz Ayuso ha perdido la confianza del ciudadano y la gente la ha tomado con ella. Así en los WhatsApp se ha podido ver y leer:
- Le comenta ella al alcalde: ¿Te lo puedes creer? Les monto un hospital en tres meses…Se lo lleno de enfermos… ¿Y aún quieren que contrate personal? ¿Y qué más? Y responde el alcalde: ¡Increíble!
- Escrito en blanco sobre negro: “Ayuso dice que los días que haya luna se puede salir, los de cuarto menguante solo los nacidos días impares, creciente los pares, y el tercer martes de cada mes no sale nadie. Ok?”.
- En la imagen, la señora Díaz Ayuso en el campo parada mirando a su derecha, y junto a ella unos cuantos burros. El texto dice: “A aquí vemos a un animal terco, obstinado, poco razonable y nada racional. A su lado, un simpático burro”.
- Una imagen en la que se ve a la señora Díaz Ayuso en un primer plano de lado. Una flecha en rojo señala a su cabeza con el cráneo en negro y se puede leer: “La España vacía”.
- El Jueves: La OMS descarta confinamientos masivos en Madrid porque con “encerrar a su presidenta bastaría”.
- En la imagen aparece un reloj dando las 02.00 h y un primer plano de Díaz Ayuso con un gesto como diciendo “y qué pasa”. Y se puede leer: “25 de octubre se retrasa solo el reloj. La otra ya está retrasada”.
- Imagen de Díaz Ayuso en primer plano, pensativa. Se puede leer: “¿Si contrato para el nuevo hospital un terapeuta, cuenta como 1024 gigapeutas?”.
Cabe destacar que los cuatro primeros han sido publicados y difundidos los últimos cuatro días, mientras el resto de mensajes lo fueron las semanas anteriores.
Señora Ayuso, acepte usted la realidad. Si antes nos confinamos, antes podremos salir de la pandemia, o acaso se cree usted que el madrileño de la calle le gusta estar como en prisión y sin fecha de salida. Europa se está confinando en esta segunda etapa de la coronavirus dados los resultados de contagio tan exagerados que está teniendo todo el mundo. Imagínense que Francia por ejemplo ha tenido hace una semana más de 42.000 positivos en un solo día. Nosotros vamos por el mismo camino y tengan en cuenta que la edad de los contagiados ha bajado hasta alcanzar una media de 40 años, todo es gracias a las fiestas particulares que montan nuestros jóvenes de alrededor de 25 años de edad.
Pero no se olviden de Gaza, Siria, Irak, Egipto, Yemen, ni de los cientos de miles de refugiados que agazapados buscan paz y sosiego.